Hola amigos de Gamehag, escribo este artículo a modo de reseña de la secuela del primer Empire Earth, juego de estategia en tiempo real de 2001. Dentro del artículo iré utilizando la negrita y los subrayados para resaltar aspectos importantes y que la lectura no resulte monótona.
Esta entrega salió al mercado PC en 2005 de la mano del estudio americano Mad Doc, fundado en 1998 por Ian Lane Devis, Actualmente se llama Rockstar New England. En su momento costaba 50 euros y la caja contenía dos discos CD ROM, actualmente pueden comprar digitalmente la edición Gold en la tienda de Gog pero es una edición para el idioma inglés.
Estamos ante un RTS que abarca un periodo histórico enorme, de 12000 años. Tan largo tiempo se estructura en 15 épocas distintas, cada una con sus edificios y unidades. Tienes que dirigir tu civilización hasta la supremacía total a través de todos esos milenios, usando las mejores unidades bélicas de cada época y construyendo una base inexpugnable. Recoges los recursos, construyes edificios, produces tropas e investigas tecnologías en una combinación explosiva de complejidad y velocidad de juego diferente del resto de productos del género.
Los recursos van cambiando a medida que se suceden las diferentes épocas. El petróleo y el uranio, por ejemplo, sólo aparecen en el mapa en los últimos momentos de la partida. Piedras y madera serán muy valiosos en los períodos históricos más antiguos.
Cada civilización de las quince incluidas tiene sus propias unidades específicas y una serie de bonus y maravillas tecnológicas, que hacen que la elección del bando sea algo que debemos considerar profundamente.
La forma de ir avanzando a lo largo de las edades es investigar las tres tecnologías de cada uno de los tres ámbitos de investigación: imperial, militar y económico, para lo que tendrás que construir universidades y alojar en ellas a ciudadanos. El premio de liderar la investigación no es sólo tener mejores armas, sino que además te proporcionará un bonus temporal denominado “coronas”. El jugador que posea estas coronas en cada momento ganará ventajas sobre sus enemigos, como mejoras a la producción o una infantería más dura, por ejemplo.
Esas coronas tienen una duración determinada, y cuando acaba el bonus temporal la “corona” vuelve a quedar a merced del que se encuentre más avanzado tecnológicamente. Así que no olvides destinar buena parte de tus recursos a la investigación, ya que la ventaja estratégica de controlar coronas resulta esencial en este juego de estrategia.
UNIDADES, GUERRAS Y TERRITORIOS
La variedad entre todas las civilizaciones es enorme, más de 500 diferentes entre tierra, mar e incluso aire. Tenemos típicos guerreros, caballeros, tanques, cañones, barcos, misiles, cazas, etc según el período histórico.Los héroes son unidades muy poderosas que resultan muy efectivas en el combate pero que, además, tienen diferentes habilidades especiales que las vuelven imprescindibles en las batallas a gran escala.
Empire Earth II ofrece un complicado sistema de territorios, algo que te obligará a meditar tus acciones teniendo en cuentas tus relaciones vecinales y cómo podrías asegurar tu supremacía. Los mapas están divididos en zonas o regiones. Al comenzar a jugar tú controlas unas pocas zonas y tus oponente otras tantas, pero la mayoría no están controladas por nadie. Uno de los conceptos más interesantes del juego es la posibilidad de reclamar la posesión de territorios vacíos. Esto hace que sólo su propietario pueda construir edificios o explotar sus recursos. Muchas veces, sólo por reclamar un territorio uno de los rivales te declarará la guerra de forma individual o integrando una alianza.
Por ello este juego también tiene un completo sistema de tratos que te permite negociar acuerdos con tus vecinos: alianzas militares, planes de ataque conjuntos, vasallaje, económicos, etc. En las partidas multijugador envías planes de guerra a tus aliados, pero ten cuidado porque alguien desleal puede cambiar de bando y filtrar tus tácticas.
En la campaña de un jugador empezamos con tribus coreanas que luchan por la unidad e independencia frente a sus vecinos chinos. En el medievo se traslada hasta tierras germanas, donde los distintos reinos acabarán dando lugar a la poderosa Alemania tras el auge de Prusia y sus campañas reunificadoras. Pasamos entonces a los Estados Unidos en 1898 y su guerra contra España, su desarrollo militar y tecnológico en las dos guerras mundiales y finaliza en un conflicto imaginario usando el armamento más evolucionado a fines del siglo XXI.
Como habrán podido leer hasta ahora es un juego bastante complejo y con muchas variantes, no se asusten porque hay una forma simplificada de manejarlo todo. Los desarrolladores han creado una serie de de herramientas orientadas a simplificar y automatizar las tareas de MICRO GESTIÓN para que nuestro Imperio casi funcione en modo de piloto automático y puedas concentrarte en las tareas más importantes.
Así, puedes decidir el número de trabajadores asignados a la recolección de cada recurso sin tener que buscarlos uno por uno, o sintonizar un sistema de cámaras que te permite ver todo lo que pasa en varios lugares a la vez, o dar la orden a la Inteligencia Artificial (IA) para que maneje una unidad exploradora de territorios, decidir que los edificios ajusten automáticamente su producción de recursos ...
Finalizaré el articulo con unos consejos de combate: las estaciones, la meteorología y hasta el viento son factores que están muy presentes y nos obligarán a cambiar de tácticas y formaciones. En invierno los movimientos son más lentos y si te pilla una tormenta tu visibilidad puede ser nula, haciéndote vulnerable a los ataques sorpresa e incluso puedes acabar marchando en dirección equivocada. En los puentes tendrás que sacrificar unidades mientras el resto de tu ejército sigue marchando, no pierdas tiempo intentando socorrerlos.