hace 1 año
En este articulo describo brevemente mi experiencia con un juego llamado BioShock Infinite y mi reseña al juego, una recomendación y cosas que no te deberías de perder.
No tengo idea de cuantas perdonas conozcan este juego al día de hoy, no es tan importante para la cultura de los videojuegos actual una pieza como esta en la que se emplea una historia, un enemigo real, un pasado y también un futuro que averiguar al paso del tiempo.
Este juego toma, saca, moldea y transforma los temas de la
religiosidad y los muestra de las formas más crudas posibles: Falsos pastores, Profesias, Dictaduras y un enemigo en común: el anticristo, o el
"falso pastor": Nosotros, por esto, es que quizá no sea gustoso si eres cristiano, católico, evangélico, etc. Juega también con la estética del pasado mesclada con el futuro que todos hemos creído alguna vez que llegara; ese mismo futuro con cosas que desafían la gravedad y el poder de ser un super humano con un poco de dinero en la mano. Este juego al día de hoy es muy infravalorado y es como si nadie supo o supiera de su existencia, de hecho, videos del mismo hace 3 años no conseguían llegar ni al millón de visitas.
Este juego comienza así, dirigiéndonos al mundo de Columbia por una simple investigación a un faro por la curiosidad que nuestro personaje acompañado de otra persona tenían, para después mostrarnos una escena, donde después de ser bautizados por un culto... Morimos y volvemos a nacer...En el mundo de los cielos, sí, así es; en Columbia. El juego nos permite husmear entre toda la ciudad presumiendo de la belleza y la paz de la misma, siguiente de eso nos muestran nuestro primer poder, finalmente después de un tiempo de investigación y felicidad, nos proceden a mostrar la verdadera cara de este lugar; una pequeña y graciosa rifa en la que ganamos, sacando a la luz los cuerpos de dos personas que se amaban, una mujer de color y un hombre blanco, ambos atados por que él se enamoró de ella, demostrando la poca tolerancia que había en esta época/lugar a las personas de color, lo que tenemos que hacer es pegarle a la pareja, claramente no lo hacemos y le vamos a pegar el presentador, y esto tiene una recompensa para nosotros en el futuro, aunque también descubren que somos el "falso pastor", este suceso desata una masacre creada claramente por nosotros en forma de defensa y continuamos así hasta que llegamos a un lugar muy extraño donde parece que hay un pastor protegiendo excesivamente a su hija, luego la vemos y notamos unas escenas donde vemos como su "hija"
Elizabeth tiene el poder de abrir distintas dimensiones/portales y luego revelamos que hemos venido a buscar a Elizabeth, ella descubre que la habían estado observando y se va con nosotros.
Parece que todo había acabado, pero la felicidad duró poco tiempo, ese ambiente tan libre y alegre era una trampa para nosotros mismos, no estábamos en nuestra tierra, sino que aun estábamos cerca de Columbia, siguen las persecuciones y lucha, para tomarnos un desgarro donde Elizabeth nos dice que abría desgarro cuando quería en su torre, dejándonos en claro que eso lo puede hacer siempre que ella quiera. Durante toda la exploración siguiente discutimos con ella, ella desconfía y vuelve a confiar en nosotros, nos promete que siempre nos cuidara y que incluso cuando nos estemos muriendo "luchara" y hará lo que pueda para mantenernos con vida.
Después de muchas cosas, guerras, descubrimientos sobre el ambiente que nos rodea, portales abiertos, nuevas dictaduras, etc., etc., nos revelan algo muy impactante...
Es necesario jugar el juego para descubrirlo.
Personalmente me gusto mucho, lo encantadora que es Elizabeth incluso con su gran poder, como manejan todos estos temas de una forma tan artística y como también vemos como después de nuestra llegada Columbia va quedando hecha pedazos dejándonos así algo de culpa, realmente no soy tanto de videojuegos, prefiero actividades como leer u estudiar cosas nuevas, pero cuando comencé este juego no pude parar hasta terminarlo, es una joya infravalorada que muchas más personas deberían probar, prometo que es imposible arrepentirse de haberlo hecho.