Corría el año 2000 cuando la compañía californiana Verant sacó este producto para PC, la primera expansión del Everquest.
En España Ubisoft distribuía el juego base más esta expansión llamada “Las ruinas de Kunark” por 48 euros. En aquella época ese juego de rol online era una de las gallinas de oro de Sony, acceder a los servidores de juego costaba casi 10 dólares mensuales y en pocos meses ya tenían un cuarto de millón de suscriptores de pago
Everquest está ambientado en un mundo de fantasía rol medieval, donde los personajes pueden ser gnomos, enanos, humanos, elfos... hasta 13 razas disponibles para elegir, incluyendo hombres largarto Iksar introducidos con esta expansión. Se pueden personaliza en su aspecto físico, facciones y ropas.
Cada raza puede ser de una ocupación distinta, hay 14 a elegir con sus habilidades y bonificaciones específicas: bardos, clérigos, druidas, magos, guerreros…
En principio lo más atrayente sería crear un personaje capaz de realizar magia, aunque sus habilidades físicas son bastante cortas, a lo largo del juego recompensará en mayor medida tener capacidades mágicas. Por ejemplo con la magia adecuada un personaje se puede mover de un punto a otro del continente en un click, podría congelar o quemar enemigos a distancia, etc
Finalmente escogemos religión de culto entre 16 disponibles. Esta decisión influirá en el desarrollo del juego: si decidimos honrar a Innoruuk, uno de los dioses del Everquest que promulga el odio, no podemos visitar el templo de Rocet Nife (el gran curador). También podemos optar por ser ateos, siempre que nuestro personaje no sea un clérigo o chamán.
ESCENARIO
Nos movemos por el mundo de Norrath, que está formado por varios continentes y ciudades. Si nos desplazamos andando entre cordilleras y bosques tardaremos varias horas reales entre las principales ciudades. Esta edición ha añadido las tierras de Kunark con extra items y 20 nuevas zonas a explorar que añaden un 35% territorio extra. Kunark está conformado por tierras de jungla, pantanos y hasta zonas nevadas, con los restos de una antigua civilización de estilo grecorromano.
La única ciudad habitada es Cabilis, donde moran y sobreviven los hábiles nadadores hombres lagarto Iksar. A Kunark solamente se puede llegar en barco o con una teleportación en el caso de magos y druidas. Debemos elegir la ciudad de inicio con cuidado porque allí pasaremos un largo tiempo, subiendo de nivel nuestro personaje conforme realizamos las tareas que le corresponden.
JUGANDO AL EVERQUEST
El tope de nivel para un personaje es 60. La mejor manera de ganar experiencia y subir de nivel es matar alguno de los monstruos de la ciudad y sus alrededores, junto a la práctica de las habilidades propias del personaje.
Nuestro personaje puede interactuar desde una perspectiva en primera o tercera persona, bajo su vista principal aparece una ventana de texto con los mensajes del juego. A la vez que saltamos, luchamos y corremos para explorar debemos pararnos a hablar con otros personajes, atesorando información sobre el mundo de Everquest y sus posibilidades.
Pulsando la tecla “enter” aparecía el chat donde hablar, asimismo con una lista de comando podíamos incluso realizar acciones humanas personalizadas como bailar, gritar, apretar manos, sonreír y hasta jugar.
Nuestras salidas campestres no serán precisamente una placentera excursión con bocata de tortilla, fuera de la ciudad y sus guardianes nos acechan un montón de malignas criaturas y personajes malvados. Atacando arañas, goblins, esqueletos y otras alimañas variadas ganamos experiencia y nivel necesarios para enfrentarnos a mayores retos futuros
En el mundo de EverQuest cada vez que fallecemos no debemos crear nuevo personaje, reaparecemos en un lugar cercano al deceso, pero sin dinero y con menos de la experiencia acumulada. Si nos acercamos al lugar de la muerte encontramos nuestro cadáver y podemos recuperar casi todas las pertenencias.
No solamente puede morir nuestro personaje tras un combate, sino que tiene que alimentarse regularmente de modo que necesitaremos dinero para comprar raciones, armas y magia para matar animales o incluso encontrar una caña de pescar peces.
En la edición española la caja incluía un mapa de tela de Norrath y un extenso manual de juego de más de 100 páginas con instrucciones y listados de teclas. En las partidas también existía un “guía de ayuda”, una persona con poderes especiales que nos ayudará a resolver problemas que nos surjan, como por ejemplo recuperar nuestro cuerpo u objetos. Otra posibilidad era formar parte de un grupo o clan de jugadores, donde ayudarse mutuamente en las partidas online.
EPÍLOGO TÉCNICO
Gráficamente destacaba en su momento por la riqueza y variedad de detalles exhibidos, como los efectos metereológicos de la lluvia y tormentas, atardeceres y madrugadas … En cuanto al sonido esta expansión no traía mejoras respecto al juego base, ni tampoco música nueva