Debido a que mucha gente se interesó por mi anterior artículo, decidí escribir una segunda parte sobre este tema que tanta relevancia tiene en el mundo gamer actual al ser un género cuyos juegos llegan a cuenta gotas y con muchísima menos publicidad. Pero, oye, que no es excusa para perderse algunas de las más grandes joyas lúdicas de los últimos años. Comencemos.
The Book of Unwritten Tales
Esta aventura cuya primera impresión podría ser su anticuado diseño de personajes (no tiene malos gráficos, de hecho, los escenarios son un encanto, es simplemente que los personajes recuerdan los juegos de rol medievales salidos hace algunos años a los que, por cierto, rinde tributo) es toda una cátedra de cómo se deben escribir los chistes en el género, juega muchísimo con las referencias y gags muy elaborados, sin llegar a ser cansino, como sí lo es su segunda parte, típico juego en el que hacen chistes hasta mientras le embargan la casa. En cambio en esta entrega vemos un humor que si debería definir con una palabra, diría que esa palabra es "perfecto". Además de sus puzles, vemos una interfaz bastante amigable que facilita mucho el trabajo de resolver los puzles (quizá demasiado), sumado a que estos son bastante lógicos, no son excesivos y que siempre recompensan el pensamiento lateral, y aunque veremos puzles nunca antes vistos, no tendrás en toda la obra problemas de estancamientos si eres un aventurero curtido. Lo que la hace una opción más que perfecta para comenzar en este género. El último capítulo de The Book of Unwritten Tales es algo que muy difícilmente olvidarás, pues es fácilmente considerable hacerle un espacio entre los mejores remates de una aventura gráfica por su narrativa y puzles. Toda una pena que tanto su precuela como su continuación no conserven las virtudes de esta entrega.
7
The Whispered World
Hablar de The Whispered World es conocer el sabor agridulce en su máximo esplendor, y no quiero decir que sea un mal juego ni mucho menos, es tan simple como que si su diseñador no se hubiera dedicado a alargar el juego casi al final del mismo con todo tipo de puzles exógenos (entre los cuales se nos presenta uno de cuadros deslizantes de resolución aleatoria sin perdón de Dios), podríamos estar hablando cuando mínimo de la mejor aventura gráfica de la presente década. Su otra pega, aunque ya es algo personal, es el personaje principal, Sadwick, ese típico amigo que está todo el día quejándose de su mala suerte y al que intentas evitar a toda costa para no contagiarse de su depresión, y aunque hay una razón por la que debe ser así para que la historia funcione, son más de una las veces en las que haces click fuera de un acantilado a ver si decide lanzarse. Por el lado positivo nos encontramos un diseño artístico cuyo preciosismo es digno de una película de Ghibli, realmente todo un banquete para los ojos. Pero nuestra vista no será lo único encantado, pues cuenta con un diseño de puzles de esos donde Daedalic Entertainment quiso hacer algo más que apuntar y dar clicks, sumando a un compañero de aventura cuyas transformaciones le irán brindando una habilidad única que podremos usar para resolver nuestros retos, funcionando acá como quizá en ningún otro juego de la compañía alemana. Y la música, por su parte, ayudará a sentirnos como en un cuento donde seres mágicos harán más emocionantes nuestras vidas, aunque sin llegar a la grandeza de The Night of the Rabbit. Ojo al final, pues no dejará indiferente a absolutamente nadie.
7
Memoria
Memoria es, a gusto de un servidor, la tercera mejor obra de Daedalic Entertainment, quienes con sus más y con sus menos, son lo más parecido actualmente a lo que fue la gran L, aunque salvando las distancias (una distancia considerable pero no excesiva). Se trata de la continuación de la emocionantísima Chains of Satinav, que nos dejó con un bombo enorme a los amantes de las historias de amor, esperando como acabaría esta hermosa historia que deja a medias la primera parte. Memoria no sólo toma los mismos elementos jugables de Chains of Satinav sino que los explota y los mejora al máximo, e incluso se vuelve más emocionante, dando también un salto cuantitativo en el apartado gráfico que antes podría parecer un tanto acartonado en ocasiones. Desde el momento en el que el tradicional compañero de viaje de esta empresa alemana hace aparición, en este caso un bastón que habla, te das cuenta que estamos ante una aventura gráfica muy diferente a las demás (acompañante que no sólo está ahí para hablarnos sino que nos brinda nuevas habilidades para cierto personaje), pero que en esencia sigue siendo eso, un point n’ click de toda la vida. Quizá se le echa de menos algún personaje mucho más destacable del montón.
7
Sam and Max The Devil's Playhouse
A mi gusto, los dos personajes que conforman la “policía freelance”, no habían logrado hasta este su máximo esplendor en un videojuego. LucasArts lo intentó con el Hit the Road, y posteriormente TellTale Games tomó el testigo con Save the World y Beyond Time and Space, los tres, hay que decirlo, juegos muy divertidos debido a un humor único y negrísimo, cargado de violencia y sin respeto hacia ninguna autoridad, buenas obras jugables si se quiere. Pero a los tres les faltaba “algo” que les llevara al sitial de obra maestra: Hit the Road tenía un montón de puzles sin sentido, y las dos primeras temporadas de TellTale Games abusaban del backtracking de una manera bastante cansina y en ocasiones perdiendo además parte de la gracia de la obra de la gran L. Todos sabíamos que estos personajes daban para más, no por nada su creador, Steve Purcell, ganó con ellos un Eisner (el Oscar de los cómics) y estuvo nominado en otra ocasión, la pareja del conejo maléfico y el perro antropomórfico aficionados a la violencia y a resolver crímenes a su manera merecían algo grande, y lo iban a tener. Fue así como a la cuarta fue la vencida y TellTale Game anunció una tercera temporada de este singular dúo, The Devil’s Playhouse, que sería muy diferente a todo lo hecho hasta ahora en relación a ellos. Experimentarían y dejarían todas sus ideas en un solo juego, el resultado fue la mejor obra de la compañía y de la franquicia en forma jugable. Una aventura gráfica que incorporaba un montón de novedades como pocas veces se vio en una, acá podremos ver a Max con una colección de súper poderes, o a Sam intimidando con su imitación de Humprey Bogart, inclusive un filtro de imagen que le da un toque antiguo y levemente sobrio a los gráficos, ¡en una aventura de comedia pura y dura! Lo feliz del caso es que cada invento, por más extraño que fuese, funcionó a la perfección, y lo mejor de todo es que no tocaron la esencia de los protagonistas, que está de más decir que son perfectos tal cual son.
8
Thimbleweed Park
Los menos puristas tendrán que disculparme por incluir acá un montón de píxeles y diseños que parecen sacados de tiempos mejores para el género, pero es que el retorno de dos grandes genios como Ron Gilbert y Gary Winnick de ninguna manera podía quedar fuera de esta recopilación. Estos dos creadores siempre tendrán un lugar en el mundo del arte por haber trabajado juntos en Maniac Mansion, aventura que, aunque aún no era la explosión de calidad que hizo grande a LucasArts, sí fue la base para que esto sucediera posteriormente, y es que para este nostálgico juego se creó el legendario sistema Scumm que dominó a placer como interfaz (con algunas variantes como en Loom o Hit the Road) de las obras de dicha compañía por muchísimos años hasta su simplicación en The Curse of Monkey Island, y posicionó a LucasArts en la cima de las compañías de videojuegos de aventura. La razón por la que he tomado parte del artículo para hablar de este viejo y querido sistema, no es otro que para este Thimbleweed Park, dicho sistema regresa tal cual funcionaba en Monkey Island, Indiana Jones o Day of the Tentacle. La nostalgia que irradia el juego podría quemarte si te expones a ella sin un traje especial. Y es que no sólo se trajo de vuelta lo antes mencionado, sino también el estilo de los mundos abiertos donde podías resolver puzles sin orden determinado, siempre y cuando no cayeran en ningún pecado aventurero como podrían ser los llamados “puzles del revés” (esos puzles donde encuentras la solución antes que el problema en sí), y cuyo diseño requerían interminable cantidad de horas y estudios para su perfecta ejecución. En Thimbleweed Park, como en Maniac Mansion volvemos a los personajes múltiples, por suerte esta vez no serán tanto, cada uno con sus historias, hablidades y particularidades (y vaya particularidades que tiene el payaso, personaje que se ganará nuestros corazones a fuerza de malas palabras e insultos pesados). Otra cosa que tomó el juego del verdaderamente primer clásico de LucasArts fue el aspecto visual, al menos en cuanto el diseño de personajes, algo que dejó admiradores y detractores a partes iguales, pero si hay algo del apartado visual que sí nos encantó a la mayoría, fue el pixel art de los escenarios, como diría cualquier youtuber del montón: ¡qué graficazos! Por suerte, algo que el juego no tomó de Maniac Mansión, es que no correremos el peligro de caer en callejones sin salidas (quedarnos atrapados). Lo nuevo de Ron y Gary es, a mi gusto, el último clásico del género y espero que al bajar su precio, el volumen de ventas se dispare y este par pueda seguir sorprendiéndonos con más joyas como éstas, ¿o qué le esperaría sino al género? Por favor, compren original.
9
Quiero decir que le he cogido mucho gusto a hablar de mi género favorito, así que quizá antes de pasar a otros tipos de artículos, escriba un último sobre aventuras gráficas modernas, pues me quedaron algunas en el tintero a las que ofendería si no les dedicara un espacio. Pero dejaré que decidan ustedes en sus comentarios y valoraciones. Hasta pronto y no dejen de jugar. :)
Javi Rodríguez.
Es un muy buen juego, ya que me la pasaba horas y horas jugando con amigos.
muy buenos juegos. me ha encantado el recopilatorio , estoy voy de acuerdo. Artículo original y entretenido de leer .Gran aporte me ha gustado mucho. gracias por compartirlo con nosotros
me gustan cada tematica o sus historias son entretenidas
Es complicado decir 10 juegos y no quedarte muchos otros... de tu lista el que me falta es el Memoria, que lo quiero para tener todos los juegos de la serie The Dark Eye. Ya lo conseguiré :)